Occidente se ha puesto de acuerdo para ahogar la economía rusa como medida de castigo por la invasión a Ucrania. Mientras dure la guerra, las empresas no activarán su actividad en el país presidido por Vladímir Putin.
Qualcomm acaba de confirmar que ha dejado de vender sus chips y otros productos a empresas rusas en cumplimiento de las sanciones impuestas por Estados Unidos a este país tras la invasión de Ucrania.
Muchas grandes empresas estadounidenses han suspendido o cerrado sus operaciones en Rusia tras la invasión, aquí os dejamos el repaso a las compañías que han impuesto un veto.
Mykhailo Federov, viceprimer ministro ucraniano y ministro para la transformación digital, instó a Qualcomm a seguir su ejemplo, alegando que los productos de Qualcomm seguían estando disponibles en Rusia y estaban permitiendo que Moscú «matara a miles de ucranianos».
«Pedimos a su empresa que ponga fin a cualquier relación y detenga todas las operaciones en la Federación Rusa hasta que la agresión rusa en Ucrania se detenga por completo y se restablezca el orden justo», exponía el viceprimer ministro.
A lo que Qualcomm respondió: «Esto es incorrecto. Qualcomm ha pedido una solución pacífica a la agresión rusa en Ucrania, ha hecho donaciones directas a organizaciones de ayuda y ha igualado las contribuciones de los empleados. Y hemos dejado de vender productos a empresas rusas».
Federov respondió más tarde para agradecer a Qualcomm su actuación y sugirió que la empresa podría enviar teléfonos por satélite a los socorristas ucranianos para que pudieran responder a los incidentes y comunicarse entre sí más rápidamente.
Esta guerra está demostrando el poder de las nuevas tecnologías y las redes sociales. Donde antes había llamadas sin coger, ahora hay tuits que esperan ser respondidos mientras millones de personas presionan para que se tome una decisión.





